
GYOUZA
Empanadillas chinas
Las empanadillas Gyôza, como el ebi-shuumai, es un plato originalmente chino que se ha
hecho muy popular en Japón, especialmente en los restaurantes de ramen, donde uno
normalmente pide un plato de ramen y unas cuantas gyôza para acompañar.
Las auténticas gyôza pueden cocinarse de muchas maneras: hervidas, en sopa o fritas,
aunque las gyôza japonesas son normalmente fritas... ¡y estan de vicio! El interior también
puede variarse a vuestro gusto. Por ejemplo, para los vegetarianos, podemos sustituir la
carne por marisco, así que... ¡imaginación!
Para preparar las gyôza necesitáis una base de pasta (muy parecida a la de los canelones,
para que me entendáis), que en Japón puede comprarse en todos los supermercados,
aunque si no tenéis ganas de cocinar también tenéis la opción de comprar las gyôza ya
preparadas que veneden en los supermercados japoneses (no estoy segura de si venden
gyôzas ya preparadas en los supermecados asiáticos de Occidente). Es una solución mucho
más rápida, práctica e igual de buena.
Sin embargo, si os sentís con ganas de cocinar o no encontráis en vuestra ciudad ni gyôza ya
preparadas ni pasta para prepararlas, aquí os dejo una receta completísima para preparar
tanto la pasta como el interior de las gyôza... no pongo las medidas exactas de vegetales,
pues todo depende del número de gyôza que querías preparar... ¡vamos allá!.
Ingredientes (para unas 30 gyôza)
Para la pasta:
• 170 ml de agua.
• 200gr de harina.
Para el interior:
• 200 gr de carne de cerdo picada.
• Col.
• Cebolla verde.
• Ajo.
• Jengibre.
• Sake.
• Salsa de soja.
• Sal y pimienta.
• Aceite de sésamo.
Para la salsa:
• Salsa de soja.
• Vinagre
Para preparar la masa:
• Mezclar el agua y la harina para crear una pasta que no debería ser
pegajosa, sino
suave.
• Una vez creada la pasta, colocar un paño húmedo por encima. Dejar reposar
unos
minutos.
• Coger una pequeña porción de masa y aplastarla encima de la mesa hasta
crear un
disco plano de unos 10cm de diámetro, aunque deberiáis intentar que el centro del
disco fuese un poco más grueso que el borde.
• Repetir esta acción e ir haciendo "discos" hasta terminar la pasta.
(Os recomiendo
que coloquéis los discos sobre una base plana untada de harina, para que no se
peguen).
Para preparar el interior:
• Cortar unas cuantas hojas de col verde, un poquito de cebolla verde,
jengibre y un
poco de cebolla en pequeños trocitos --bien pequeñitos--. (La cantidad de "verde"
debería ser proporcional a la cantidad de "carne" que decidáis poner en cada gyôza,
vosotros decidís).
• Mezclar los vegetales con la carne picada. Añadir un poco de sal, pimienta,
salsa de
soja, aceite de sésamo y sake y mezclar bien (mejor hacedlo con las manos... ¡es
más práctico!).
Para preparar y freír las gyôza:
• Poner un poquito de mezcla en el centro del "disco" de masa que hemos
preparado
antes.
• Con el dedo, untar la punta de medio disco con un poco de agua.
• Cerrar la gyôza por la mitad. En teoría, debéis arrugar unas 6 veces
la punta de la
masa, algo que parece fácil de hacer, pero que sinceramente a mi me costó
muchísimo aprenderlo (y creedme, después de preparar cientos de gyôza --sí, habéis
leído bien, cientos-- para el Fin de Año Chino con mis amigos chinos, ¡no conseguí
hacer ni una gyôza perfectamente!).
• Freír las gyôza con un opoquito de aceite caliente, hasta que la base
esté dorada.
Una vez doradas, añadir un poquito de agua (más o menos que cubra algo menos de
la mitad de las gyôza).
• Cocer a fuego alto hasta que el agua se evapore.
• En una fuente, mezclar proporcionalmente la salsa de soja y el viagre.
Para comer,
mojar la gyôza en la salsa.
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