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Para 4 personas
3 pechugas de pollo
1 diente de ajo
1 cucharadita de canela molida
1 cucharadita de pimentón
1 pizca de comino
1 cucharada de aceite de sésamo
½ chile picado o gotas de salsa tabasco
Guarnición
2 tazas de arroz blanco
5 tazas de agua
Semillas de sésamo
1. Limpiar las pechugas. Cortarlas en tiras parejas y delgadas. Insertarlas en palillos para brochette. Mezclar el ajo
picado con la canela, el pimentón, el comino, el chile picado o la salsa tabasco y el aceite de sésamo. Bañar las pechugas
con esta preparación y dejar reposar en la heladera durante 20 minutos, aproximadamente. Cocinar en una grilla o una plancha
caliente y salpimentar.
2. Guarnicion: lavar el arroz pasándolo por agua fría hasta que ésta salga transparente. Colocar en una cacerola junto
con las 5 tazas de agua y cocinar sobre el fuego fuerte, tapado. Cuando rompa el hervor, bajar el fuego al mínimo y cocinar
10 minutos aproximadamente, hasta que el arroz esté tierno y haya absorbido toda el agua. Salpimentar.
3. Servir el pollo marroquí junto al arroz espolvoreado con las semillas de sésamo.
No te preocupes: el basmati es una variedad de arroz blanco que se usa habitualmente en la cocina de Medio Oriente para
realizar diferentes platos. Si no lo conseguís, no te desesperes. Reemplazalo por otra variedad: blanca, de grano largo y
fino
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