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Masa
1 kg de harina 0000
150 g de manteca
1 huevo
1 cucharada de sal gruesa
350 cc de agua
2 cucharadas de polvo de hornear
Grasa de pella para freír
Rellenos
Dulce de membrillo
Dulce de batata
Almibar
100 g de azúcar
½ taza de agua
* Masa. Entibie el agua y disuelva la sal gruesa (salmuera). Forme una corona con la harina. Coloque en el centro
la manteca blanda, el huevo y la salmuera (paso 1).
* Trabaje hasta unir y lograr una masa lisa (paso 2). Déjela reposar tapada sobre la mesada (si hace calor llévela
a la heladera).
* Sobre la mesada (si es de mármol o granito, mejor), espolvoreada con un poco de harina, estire con la ayuda de un
palote dándole forma rectangular de ½ cm de espesor, aproximadamente. Espolvoree la mitad con polvo de hornear. Doble al medio
(como si fuera un libro) y vuelva a estirar hasta lograr el mismo espesor anterior. Repita dos veces más. Si la masa se pone
muy blanda, déjela descansar unos minutos en la heladera y continúe.
* En el último plegado (paso 3), estire hasta lograr un espesor de 2 mm aproximadamente. Corte cuadrados de 12 cm (paso
4).
* Rellenos. Coloque en el centro de la mitad de ellos un cubo del dulce elegido. Pinte con agua alrededor, cubra con
los cuadrados restantes sin que coincidan las puntas (de esta manera nos quedan estrellas de 8 picos). Prense bien con los
dedos y haga 4 repulgos. Llévelos a la heladera durante ½ hora. Luego, fríalos en grasa bien caliente.
* Almibar. Caliente el agua con el azúcar y lleve a ebullición. Pinte los pastelitos con este almíbar.
Secretito: puede reemplazar la masa de los pastelitos por la comprada. Viene cortada en cuadrados y lista para usar. Pueden
rellenarse con batata, nueces o castañas en almíbar, dulce de leche repostero o lo que a usted más le guste.
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